Espíritu de Montjuïc ha puesto el cerrojo a tres jornadas dedicadas al automovilismo clásico con ocho carreras más -que se suman a las cinco que se disputaron ayer- y multitud de actividades para todos los públicos y edades. Los entusiastas del motor han podido disfrutar con un auténtico festival vintage de la mano de Escudería Targa Iberia y las Peter Auto Series, que han reunido a los clásicos más prestigiosos de las décadas de los 60, 70, 80 y 90. Se calcula que 27.000 personas han pasado por el Circuit de Barcelona-Catalunya para presenciar el evento deportivo durante estos tres días.
El paddock, normalmente inaccesible para público, se ha convertido en el espacio más concurrido. Ahí se han podido ver exposiciones como la de SEAT, que celebra el 50 aniversario del SEAT 1430 y el SEAT 850 Sport Spider; la exposición itinerante del Repsol Racing Tour; el concurso de elegancia «Arte en Movimiento» con auténticas joyas de la automoción; concentraciones de clásicos; participar en bailes de salón; o simplemente vivir el ambiente revival que ha invadido el Circuit estos tres días. Los más pequeños también han disfrutado de actividades pensadas para ellos como los autos de choque o los talleres y juegos que se han realizado en una carpa de circo, donde no han faltado los payasos.
The Greatest Trophy ha sido la disciplina encargada de inaugurar la actividad en pista esta mañana. El rebautizado trofeo italiano, el Trofeo Nastro Rosso, que agrupa GTs y deportivos de las casas más prestigiosas de coches, ha tenido un ganador inesperado. Christian Bouriez, a los mandos de un Bizzarrini 5300 GT 1965, ha sido el vencedor de una épica y ajustada batalla en pista. Bouriez, que ayer no pudo terminar la prueba y que hoy partía desde la última línea de parrilla, ha podido resarcirse a lo grande.
La nutrida parrilla de Heritage Touring Cup ha sido liderada por un BMW 3.0 CLS 1975 pilotado por Christian Traber. El suizo ha realizado un trabajo impoluto en el certamen que pretende rememorar el antiguo Campeonato de Europa de Turismos (ETCC) disputado entre 1966 y 1984. Traber firmó la ‘pole position’ y hoy ha aprovechado su ventaja en la parrilla para lograr también la victoria. 7
Los prototipos de los años 80 y 90 han sido protagonistas en la última prueba de Group C Racing. La modalidad de resistencia que vuelve a estar de moda en la actualidad ha sido conquistada por Dominique Guenat, a los mandos de un Peugeot 905 EV1B 1993. Guenat ha intercambiado la posición de salida con Kriton Lendouis (Mercedes Benz C11 1989), que ha sido segundo finalmente.
Una de las pruebas más esperadas del fin de semana se ha hecho de rogar hasta hoy, cuando por fin ha mostrado sus encantos sobre el trazado. Los cerca de 50 participantes de la Classic Endurance Racing 1 han hecho homenaje a sus GTs y Prototipos de 1966 a 1974, con una hora de emociones fuertes. El más aventajado ha sido Claudio Roddaro con su Porsche 917 1969. Aun así, nada fácil se lo ha puesto David Hart con el Lola T70 Mk III B 1969. Solo tres segundos de diferencia entre ambos, con Alexander Furiani (Chevron B 19 1971) muy retrasado, en la tercera plaza.
La Classic Endurance Racing 2, por su parte, que concentraba los clásicos más modernos de esta disciplina (de 1975 a 1981) ha bajado el telón de Espíritu de Montjuïc. Con una bandera roja durante los últimos compases que ha provocado el fin prematuro de la carrera, Yves Scemama se ha coronado vencedor a los mandos de un TOJ SC 304 1976. A pesar de no haber visto la bandera de cuadros en la pista, Henry Fletcher (Chevron B26 1974) y Maxime Guenat (Lola T 286 1976) han acabado persiguiendo la estela del suizo y copando el podio.
La única prueba monomarca del evento ha sido la de 2.0L Cup, representada por los Porsche 911, un modelo emblemático muy popular en la década de los 60. Sin duda alguna, se podía pronosticar que iba a ser de las carreras más reñidas, y así ha sido. Andrew Smith y Oliver Bryant han tenido que esperar a la penúltima vuelta para recuperar la primera posición que habían obtenido en los entrenos calificativos, disputándose el oro con Mark Sumpter, que al final ha sido segundo. La lucha por el tercer escalón del podio ha sido igual de vibrante: Xavier Dayraut se ha puesto tercero después del último giro de la carrera, entrando a la recta principal.
El contrapunto a los vehículos más antiguos lo ha puesto la Endurance Racing Legends, con modelos de finales de los 90 y principios de los 2000 que disputaban carreras como las de Le Mans Series. Con un Ferrari 333 SP 1996, Michel Lecourt ha brillado por encima del resto. El francés, junto con su compañero Raymond Narac que ayer fue segundo, ha marcado el ritmo en la categoría, con excelentes resultados durante todo el fin de semana.
Independiente de las Peter Auto Series, el campeonato ‘de casa’ ha celebrado también una última batalla en el Circuit. David Hart y Olivier Hart han sido los nombres propios del Iberian Historic Endurance. El dúo holandés ha monopolizado la posición de honor con un Ford GT40. El certamen ibérico es el que más participantes de casa presentaba. El mejor clasificado de este colectivo ha sido Pedro Salvador (Porsche 911 3.0), en la octava posición absoluta.